Directrices para Evaluaciones de Emergencia
De OCHA Colombia Wiki
Las Directrices para Evaluaciones de Emergencia son guías preparadas por la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja en 2005 para llevar a cabo evaluaciones de emergencias alrededor del mundo. En Colombia, sirven cómo una parte de la metodología de la Metodología de Evaluación Rápida de Necesidades Humanitarias.
Introducción
¿Por qué es necesaria una metodología de evaluación?
La evaluación es un elemento decisivo del proceso de planificación de programas, pues la información que en ella se obtiene forma la base para la toma de decisiones. Aunque la buena información no es garantía de un buen programa, la mala información sí es, casi siempre, sinónimo de un programa deficiente. Por otra parte, la utilización de una metodología estándar permite comparar los resultados de diferentes evaluaciones.
¿Quién va a utilizar estas Directrices?
Las presentes Directrices están diseñadas para su utilización por cualquier persona que realice una evaluación, como:
- miembros del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, y
- generalistas (no es necesario poseer conocimientos técnicos específicos para utilizarlas).
¿Cómo utilizar las Directrices?
Las presentes Directrices orientan respecto a cómo organizar las evaluaciones de emergencia. El orden de los capítulos corresponde aproximadamente al orden en el que se realizan las diferentes tareas durante una evaluación real: planificación, trabajo en el terreno, análisis y elaboración del informe. No obstante, una evaluación no es un proceso lineal, y gran parte de dichas tareas se realiza en paralelo.
Le recomendamos comenzar con la lectura del documento completo, a fin de entender su estructura y familiarizarse con el contenido. A la hora de utilizar las Directrices para dirigir una evaluación real, usted deberá ir avanzando y retrocediendo en el documento. Para facilitarle este proceso, hemos señalado el contenido de los apartados en el margen externo de las páginas. La Cruz Roja y la Media Luna Roja trabajan en emergencias de índole muy variada, lo cual implica que ninguna evaluación es igual. Las presentes Directrices no explican todas las actividades para todas las evaluaciones, pero sí proporcionan un marco a partir del cual organizar una evaluación. Es importante el procedimiento. A medida que usted avanza en las Directrices, podrá ir abarcando los principales aspectos esenciales para que la evaluación resulte exitosa. En función del tipo de emergencia de que se trate, algunas partes de las Directrices le resultarán más útiles que otras y usted deberá decidir cómo adaptar las ideas aquí presentadas a su situación particular. Los principios esenciales de una evaluación de emergencia son la curiosidad y rigurosidad, y las Directrices pretenden ayudarle a aplicarlos.
Conceptos Básicos
Toda evaluación se basa en el marco para la evaluación de la vulnerabilidad y la capacidad propuesto por la Federación, que sugiere analizar los problemas de las personas y la capacidad que poseen para abordarlos. De acuerdo con dicho marco, la intervención de la Cruz Roja/Media Luna Roja puede resultar apropiada cuando mediante dicha capacidad no se logra solucionar los problemas (véase el proceso correspondiente en la Figura 1).
Vulnerabilidad
“Las características de una persona o un grupo desde el punto de vista de su capacidad para predecir un peligro natural o antropogénico, hacerle frente, resistir a sus efectos y recuperarse de éstos.”<ref>Evaluación de la vulnerabilidad y la capacidad. Guía de la Federación Internacional. Federación Internacional, Ginebra, 1999.</ref>
- Las personas siempre son vulnerables a algo (p. ej. un agricultor es vulnerable a la escasez de lluvia). No establezca hipótesis acerca de la vulnerabilidad a partir de experiencias adquiridas
en otro lugar.
Capacidad
“… los recursos de los particulares, las familias, las comunidades, las instituciones y los países para resistir el impacto de un peligro.”<ref>Idem</ref>
Estrategias para hacer frente a un problema
Formas en las que se aplican las capacidades.
El Ciclo de Evaluación
Las evaluaciones se agrupan en tres categorías: evaluaciones rápidas, evaluaciones detalladas y evaluaciones continuas.
Evaluación rápida
Se realiza después de producirse un cambio importante, como i.e., un terremoto o un desplazamiento repentino de refugiados, y proporciona información sobre las necesidades de los afectados, los posibles tipos de intervención y los recursos necesarios.
Normalmente, la evaluación rápida se realiza en una semana o menos tiempo. Le sigue una evaluación detallada.
Evaluación detallada
La evaluación detallada se realiza por cualquiera de las siguientes razones:
- se ha realizado una evaluación rápida y se requiere información más detallada;
- la Cruz Roja/Media Luna Roja piensa trabajar en una nueva zona y necesita información detallada sobre la cual basar sus decisiones;
- la Cruz Roja/Media Luna Roja opina que la situación está cambiando poco a poco, y necesita más información (p. ej., en el caso de una sequía que se agudiza lentamente);
- las evaluaciones detalladas se realizan en aproximadamente un mes, aunque pueden consumir más o menos tiempo en función de la extensión de la zona a evaluar, la complejidad de los problemas y los recursos disponibles.
Evaluación contínua
Después de efectuar una evaluación detallada, y si permanece trabajando en la zona, la Cruz Roja/Media Luna Roja realiza una evaluación continua para actualizar permanentemente la información.
La evaluación continua eficaz le ayudará a detectar los cambios rápidamente. Una vez detectado un cambio, podrá realizar una evaluación rápida o una evaluación detallada, utilizando la información de la evaluación continua como información secundaria.
Recopilación de información
En las evaluaciones se combinan la observación y las entrevistas semiestructuradas.
Nota — Cuestionarios
En las presentes Directrices no se han incluido cuestionarios, que no resultan demasiado útiles en las evaluaciones generales de emergencia. Las situaciones de emergencia se caracterizan por una gran incertidumbre, por lo que el proceso de evaluación debe ser flexible. Los cuestionarios, sin embargo, se basan en un conjunto determinado de preguntas formuladas antes de comenzar el trabajo en el terreno. Además:
- la utilización de cuestionarios en el estudio de una situación compleja y delicada puede resultar en información engañosa;
- para diseñar un buen cuestionario son necesarios conocimientos técnicos, experiencia y un buen entendimiento de la situación. Los cuestionarios permiten complementar la información obtenida
mediante entrevistas semiestructuradas y observación (particularmente en ámbitos técnicos como el del agua potable y el abastecimiento de agua). Deben estar diseñados por un especialista en la materia correspondiente, que entienda en profundidad la situación de emergencia concreta. Directrices para las evaluaciones de emergencia 13 Entrevistas/Cuestionarios Definición: “Una entrevista semiestructurada es aquella en la cual el entrevistador sabe exactamente qué información desea obtener, pero en la cual las preguntas no se plantean en un orden específico, ni siquiera directamente sobre la cuestión de interés. Las preguntas no siguen el esquema rígido de un cuestionario.”<ref>Cover pages and Introduction.pdf The Household Economy Approach: A resource manual for practitioners. Save the Children, Londres, Reino Unido, 2000.</ref>
Planificación de la Evaluación
- ¿Es necesaria una evaluación?
- ¿Cuáles son los objetivos de la evaluación?
- ¿Qué tipo de evaluación es apropriado?
Responsabilidades en la evaluación
Se recomienda que a lo largo de un ciclo de evaluación sean responsables de todas las fases las mismas personas. Con ello se logra mejorar el entendimiento de la situación, minimizar la pérdida de información y mejorar la coherencia entre las diferentes fases de los programas. Las entidades más apropiadas para asumir las responsabilidades son las Sociedades Nacionales y las delegaciones en el terreno.
¿Es necesario realizar una evaluación?
La realización de una evaluación de emergencia puede decidirse por cualquiera de las siguientes razones:
- se produce una situación de conmoción o un cambio repentino (p. ej. una erupción volcánica, una ofensiva militar, etc.);
- se piensa que en el futuro puede plantearse una emergencia (p. ej. creciente inestabilidad política, sequía, etc.);
- se necesita más información sobre una emergencia ya existente.
Por otra parte, son numerosos los motivos que pueden empujar a decidir que no conviene realizar una evaluación, entre otros:
- es imposible acceder a la región afectada;
- ya se dispone de información adecuada (p. ej. informes de otros organismos);
- ya están realizando evaluaciones en la zona afectada muchos organismos y existe el riesgo de que la población se “fatigue”.
Fatiga de la población debida a evaluaciones frecuentes
Puede presentarse cuando una misma zona ha sido evaluada múltiples veces por diferentes organismos. Las personas están frustradas porque se les pide una y otra vez que respondan a las mismas preguntas, y frecuentemente no perciben resultados obvios. Finalmente pierden la paciencia en lo que se refiere a las “evaluaciones humanitarias”. En situaciones tales, es poco probable que una evaluación arroje información útil.
Revision preliminar de información secundaria
Realice un examen rápido de información secundaria para decidir más fácilmente si realizar o no una evaluación. Estudie los informes de los medios de comunicación, póngase en contacto con otros organismos humanitarios y el Gobierno, y converse con personas que hayan regresado recientemente de la región afectada. Determine:
- las características de la emergencia (o de la posible emergencia);
- la urgencia de la situación; y
- qué información le falta.
Si decide realizar una evaluación, la revision preliminar de información le proporcionará la base sobre la cual formular los objetivos y los términos de referencia de la evaluación.
Objetivos y términos de referencia
¿Por qué desea realizar una evaluación? Defina los objetivos generales, las preguntas a las que desea dar respuesta y las actividades que deben realizarse. Determine, concretando en la medida de lo posible, qué resultados debe obtener el equipo de evaluación. Sea realista. ¿Cuál es el volumen mínimo de información necesario para obtener esos resultados? Tenga en cuenta qué personas van a utilizar la información y cuáles son sus necesidades. Normalmente, la información obtenida en la evaluación la utilizarán:
- personal de programas y de operaciones;
- recaudadores de fondos;
- departamentos de comunicación y de medios de comunicación;
- cabilderos.
Formule los términos de referencia, explicando con exactitud qué se espera que logre el equipo de evaluación.
Tipo de evaluación
Decida qué tipo de evaluación va a realizar (rápida, detallada o continua). Aunque todas las evaluaciones se basan en un mismo principio (determinar las vulnerabilidades y capacidades), la forma de recopilar la información depende del tipo de evaluación.
Evaluaciones rápidas y evaluaciones detalladas
Las evaluaciones en el terreno rápidas, así como las detalladas, siguen un mismo proceso: observación, entrevistas y recopilación de información sectorial. Las principales diferencias entre los dos tipos de evaluación son las siguientes:
- Número de lugares visitados: En las evaluaciones rápidas se visitan menos lugares, por lo que resulta enormemente importante seleccionarlos cuidadosamente (véase apartado 5.4).
- Número de personas entrevistadas: En las evaluaciones rápidas se entrevistan menos personas. Ante la limitación que ello supone, es importante que los entrevistados sean lo más heterogéneos posible.
- Importancia de las hipótesis: En una evaluación rápida, cuando se permanece en el terreno poco tiempo, las hipótesis revisten una gran importancia. Se basan en anteriores experiencias con emergencias similares y en los conocimientos acerca de la zona afectada. En una evaluación detallada, sin embargo, se permanece más tiempo en el terreno, por lo que las hipótesis son
menos importantes.
- Importancia de la información secundaria: En las evaluaciones rápidas se dispone de menos tiempo para recopilar información de primera mano, por lo que la información secundaria posee mayor importancia que en las evaluaciones detalladas.
Evaluaciones continuas
En las evaluaciones continuas, la información se obtiene a través de tres enfoques:
- Informantes clave: Proporcionan periódicamente información de gran calidad.
- Indicadores: Pueden utilizarse para recopilar información indirectamente y para realizar comparaciones a lo largo del tiempo.
- Métodos informales: En su trabajo diario, el personal y voluntarios de la Cruz Roja/Media Luna Roja (en particular aquellos que trabajan en las filiales) están en contacto permanente con la población local, con funcionarios y con personal de otras organizaciones humanitarias. Ello les permite entender la situación y detectar los cambios que se producen en la vida de las personas. Generalmente, en la evaluación continua, se combinan los tres enfoques y la información obtenida se reúne en una base de datos (electrónica o sobre papel).
Trabajo de Oficina
Una vez decidido que se va a llevar a cabo una evaluación, y antes de realizar el trabajo en el terreno, deben abordarse determinados asuntos, normalmente en la oficina central de la Sociedad Nacional o en la oficina de la delegación del país afectado. Pueden prestar apoyo las Delegaciones Regionales, y, en Ginebra, la Secretaría de la Federación y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
Coordinación y evaluaciones conjuntas
El Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja
Utilice todos los recursos disponibles y convenientes del Movimiento. Si en la evaluación participa más de un asociado del Movimiento, tenga en cuenta las capacidades de cada uno de ellos y determine su función de acuerdo con:
- el mandato específico de cada asociado y su especialidad en las
operaciones;
- las normas y leyes de la Sociedad Nacional del país afectado;
- el Código de conducta relativo al socorro en casos de desastre para el Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja y las organizaciones no gubernamentales (especialmente los Anexos 1, 2 y 3)5;
- los recursos humanos y para las operaciones;
- la función potencial en futuras operaciones;
- las limitaciones de asociados concretos.
Asociados externos: evaluaciones conjuntas
En la evaluación pueden participar otras organizaciones (gubernamentales y no gubernamentales), lo cual puede tener las siguientes ventajas:
- mejor cooperación y coordinación en la planificación y ejecución de los proyectos;
- uso eficiente de los recursos (personal, logística, etc. comunes durante la evaluación);
- menos fatiga de la población motivada por excesivas evaluaciones. Existen numerosas formas de distribuir las responsabilidades durante las evaluaciones conjuntas, como lo muestran los dos supuestos siguientes:
- Organismos especializados en diferentes ámbitos se dividen el trabajo. P. ej., un equipo de evaluación y coordinación en el terreno (FACT) controla el suministro de agua y el acceso a asistencia sanitaria, mientras que el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) se ocupa de la escolarización de niños desplazados.
- Organismos con intereses similares se dividen la zona. P. ej., el CICR y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) realizan una evaluación sobre seguridad alimentaria, cada uno en un área de
la zona a evaluar. Las evaluaciones conjuntas son factibles cuando:
- las organizaciones participantes comparten los mismos valores y principios de operación;
- las organizaciones participantes aplican metodologías similares o, al menos, compatibles.
En determinadas circunstancias, no se considera conveniente realizar evaluaciones conjuntas, p. ej. cuando:
- las evaluaciones están vinculadas a un mandato específico (p. ej. la labor de protección del CICR);
- los valores y los principios de operación de las organizaciones no son compatibles;
- la colaboración representa una amenaza para los principios de neutralidad e imparcialidad;
- parece que las organizaciones o los individuos no son imparciales. Siempre que sea posible, establezca acuerdos oficiales que especifiquen las funciones y responsabilidades de cada organización en la evaluación conjunta. Aunque no sea posible llevar a cabo una evaluación conjunta, es esencial saber quién más realiza evaluaciones. La evaluación repetida de una misma región es señal de una mala organización, produce frustración y puede afectar negativamente a la exactitud y fiabilidad de los resultados. El examen de los informes de evaluación de otros organismos es un componente esencial del examen de información secundaria.
Equipo de evaluación
Designe al jefe del equipo de evaluación y decida cuál va a ser la composición del equipo:
- Equipo de uno o varios generalistas: Una o más personas con experiencia, pero sin conocimientos técnicos específicos.
- Equipo de uno o varios especialistas: Una o más personas con experiencia y conocimientos específicos.
- Equipo multidisciplinario: Grupo de especialistas que representan todos los ámbitos de la labor de la Cruz Roja/Media Luna Roja (ingenieros, trabajadores de la salud, etc.).
Elija la composición apropiada del equipo de acuerdo al contexto en que se realice la evaluación. Considere los siguientes aspectos:
- Si es posible, incluya en el equipo a personas que hablen la(s) lengua(s) de la zona a evaluar. Incluya a un intérprete para cada miembro del equipo que no hable la(s) lengua(s) local(es).
Procure incluir en el equipo tanto a hombres como a mujeres.
- A veces resulta útil incluir en el equipo a representantes de la población de la zona afectada.
- Ninguna persona es completamente imparcial. La forma en que se percibe una situación depende del trasfondo cultural, de anteriores experiencias, de la capacitación profesional y de muchos otros factores. Tenga en cuenta este aspecto y vele por que los miembros del equipo representen de forma equilibrada los diferentes puntos de vista. Siempre que sea posible, es mejor recurrir a personal desplegado en el país o en la zona a evaluar (personal de la Sociedad Nacional o de una delegación). Ello permite realizar evaluaciones frecuentes con costos más bajos (costos de viaje, etc.), y además se intensifican los vínculos entre la evaluación y la planificación y ejecución de los proyectos.
Una vez formado el equipo de evaluación, el jefe del equipo celebra una sesión de información para tratar de:
- los términos de referencia (o qué se espera de la evaluación);
- el plan de acción, incluidos la metodología a utilizar y el marco cronológico;
- las relaciones de trabajo (responsabilidades de cada uno de los miembros del equipo, organización jerárquica, etc.);
- los preparativos de logística para la evaluación (transporte, alojamiento, etc.);
- la seguridad: situación imperante y normas de seguridad durante la evaluación;
- otros aspectos pertinentes para la evaluación particular.
Revision detallada de información secundaria
Una de las primeras actividades del jefe del equipo consiste en realizar una revision detallada de información secundaria, para obtener:
- información de referencia sobre la zona que se va a visitar;
- información directamente relacionada con los asuntos planteados en los términos de referencia; e
- información sobre las causas y el carácter de los cambios recientes.
La información secundaria le ayuda a formarse una idea inicial de cuáles pueden ser los problemas y es útil para planificar las primeras entrevistas en el terreno. P. ej., cuando una región rural padece sequía, usted deberá conversar con los agricultores, entre otros, sobre el rendimiento de los cultivos.
Ejemplos de información secundaria
- informes de evaluaciones realizadas en el terreno por la Cruz Roja/Media Luna Roja u otras organizaciones;
- informes de los medios de comunicación;
- estudios sociales, económicos, políticos e históricos realizados por Gobiernos, universidades y grupos de investigación;
- evaluaciones técnicas de ministerios gubernamentales, universidades, organizaciones no gubernamentales y organismos de las Naciones Unidas;
- evaluaciones de la vulnerabilidad y de la capacidad llevadas a cabo por la Cruz Roja/Media Luna Roja;
- datos gubernamentales del censo;
- datos meteorológicos;
- mapas;
- ¿En qué sentido puede ser tendenciosa la información?, (tenga en cuenta con qué propósito se recopiló).
- ¿Es reciente la información?
- ¿Se basa en hechos u opiniones?
En el informe de evaluación, incluya siempre detalles sobre las fuentes de información secundaria.
- relatos de testigos presenciales (personas que hayan regresado recientemente de la zona afectada);
- conversaciones con expertos sobre la región afectada o cuestiones técnicas pertinentes.
Existen otras muchas posibles fuentes. En cada situación, examine qué información resultaría útil y de dónde podría obtenerse. Para conocer la exactitud y utilidad de la información secundaria, plantéese las siguientes preguntas:
- ¿Cómo fue recopilada la información? ¿Qué metodología se aplicó?
- ¿En qué grado es digna de confianza la fuente de información?
Selección de las zonas a visitar
Casi nunca es posible visitar toda la región afectada por una emergencia, por lo que es necesario seleccionar zonas representativas. Sin embargo, las limitaciones de tiempo y acceso suelen impedir realizar la selección a través de métodos estadísticos. Por ello, seleccione las zonas y poblaciones que correspondan a los criterios expuestos a continuación recurriendo a información secundaria:
- Prioridad 1: Zona y/o población directamente afectadas. P. ej., una zona afectada por un terremoto o conflicto militar, o una población desplazada forzosamente.
- Prioridad 2: Zona y/o población indirectamente afectadas. P. ej., zonas económicamente afectadas por un conflicto en una región vecina.
- Prioridad 3: Zona y/o población no afectadas o levemente afectadas. La emergencia no afecta significativamente a las vidas y medios de subsistencia (muy útil para la comparación con zonas afectadas).
En una evaluación rápida sólo suele ser posible visitar lugares y poblaciones de “prioridad 1”. Por su parte, en las evaluaciones detalladas o continuas deberán seleccionarse y visitarse zonas correspondientes a las tres categorías. A veces, cuando se realiza una evaluación rápida, resulta imposible acceder a las zonas de prioridad 1, y en este caso se deberá procurar hablar con personas que hayan estado en las zonas afectadas.
Explique en el informe de evaluación las razones por las cuales ha seleccionado determinadas zonas. Después de las primeras visitas al terreno puede ser necesario corregir la lista de zonas a visitar. Cuando después de empezar el trabajo en el terreno se concluya que se han omitido algunas zonas importantes, éstas se podrán añadir a la lista de zonas a visitar. Cuando se disponga de poco tiempo se deberán eliminar de la lista, a cambio, otras zonas.
Si las zonas seleccionadas son extensas y contienen numerosos pueblos o municipios (“lugares”), puede ser necesario emprender una selección en nuevo nivel. Se presentan dos opciones:
- Muestreo aleatorio: Realícelo cuando los lugares sean similares; prepare una lista con todos los lugares y elija al azar los que pretenda visitar.
- Muestreo intencional: Realícelo cuando los lugares difieran significativamente; elija una serie de lugares que reflejen dicha diversidad (etnias, economía, ciudad/pueblo, etc.).
En general, es mejor visitar más lugares y entrevistar a menos personas en cada uno de ellos que viceversa.
Lista inicial de verificación
Antes de ir al terreno, el equipo de evaluación prepara una lista de verificación en la que indica la información que necesita y las fuentes a consultar. Esta labor es una parte importante del proceso de evaluación, pues durante la misma el equipo se va orientando sobre los temas que debe examinar.
Las listas de verificación son específicas para cada evaluación. No conviene utilizar listas de verificación normalizadas, pues:
- cada emergencia es diferente;
- es decisivo el proceso de diseño de la lista de verificación.
Durante la evaluación en el terreno, las listas de verificación se revisan diariamente sobre la base de los nuevos datos que se van obteniendo y el análisis permanente que de dichos datos hace el equipo.
Las listas iniciales de verificación deben incluir información sobre:
- preguntas que se van a plantear;
- métodos para recopilar la información;
- informantes (grupos e individuos);
- lugares a visitar;
- responsabilidades de los miembros del equipo (qué miembro se hace cargo de qué preguntas).
Las listas de verificación no deben utilizarse como cuestionarios, sino como una ayuda para la memoria. Durante las entrevistas, consulte de vez en cuando las preguntas de su lista para asegurarse de que está abarcando todos los aspectos.
Permanezca abierto a nuevas informaciones. ¡A medida que vaya adquiriendo experiencia dependerá menos de su lista de verificación!
Advertencia
En muchas situaciones de emergencia se forman alrededor de las principales ciudades núcleos de ayuda humanitaria (los denominados “humanitarian hubs”). Las organizaciones humanitarias se concentran en ellos, de forma que las necesidades se cubren adecuadamente en los alrededores de los mismos. Sin embargo, con frecuencia, la atención en las zonas situadas entre estos núcleos es deficiente. Por ello, procure visitar zonas situadas entre núcleos de este tipo.
Organización y Gestión
Principios a considerar en el trabajo en el terreno
En el trabajo en el terreno deben tenerse en cuenta los principios<ref>Este apartado se basa en la Norma común 2 del Proyecto Esfera, relativa a la valoración inicial (véase El Proyecto Esfera, op. cit.), y en el Código de Conducta (op. cit.).[1]</ref>:
- Consultar a las personas afectadas es esencial siempre. Pida a las personas afectadas por la emergencia que describan la situación con sus propias palabras. Concédales el tiempo que requieran. Siempre es posible considerar la opinión de la población local, incluso en las emergencias repentinas.
- Considere las necesidades particulares de diferentes grupos y personas (hombres, mujeres, personas mayores, niños, etc.).
- Analice la exactitud de la información. La información puede basarse en hechos (verdadera con toda seguridad), opiniones (depende del punto de vista de la persona que da la información) o rumores (se basa en datos no verificados).
- Considere el sesgo. Ninguna persona es completamente imparcial. Tenga en cuenta los puntos de vista de los informantes y de quienes realizan la evaluación.
- Procure detectar los grupos marginados y vele por que se defiendan sus intereses. ¿Quién tiene influencia? ¿A quién no se escucha? La marginación puede tener su origen en la desigualdad entre los sexos, en problemas étnicos o sociales y en otros muchos factores.
- Determine los cambios y tendencias que afectan a la sociedad. Procure entender cuál es la causa de dichos cambios.
- Permanezca abierto a lo inesperado. Esté preparado para poner en duda sus hipótesis. Permanezca alerta y procure deducir qué problemas resultan más importantes para las personas con las que conversa.
- Tenga en cuenta qué consecuencias tienen los problemas para la sociedad en su conjunto. P. ej., el VIH/SIDA no sólo es un problema de salud; en muchos lugares del mundo tiene consecuencias sociales y económicas devastadoras.
- Durante la evaluación, piense cómo se va a utilizar la información obtenida. ¿Qué tipo de programa podría ser apropiado? Analice los efectos positivos y negativos que podría tener un programa determinado (orientación al respecto en Iniciativa “Mejor diseño de programas” (MDP).
- Planifique las visitas al terreno. Procure evitar las horas del día en las que la gente está especialmente ocupada, las vacaciones y los días festivos. Tenga en cuenta la época del año. Hay gente que se ausenta durante ciertas épocas, y las actividades y vulnerabilidades pueden variar de una época a otra.
Métodos de recopilación de información
La información se recopila observando y a través de entrevistas semiestructuradas. En las presentes Directrices se incluyen cuatro modalidades de entrevistas:
Modalidades de entrevistas
- Entrevistas colectivas generales: Se obtiene información general sobre la comunidad.
- Entrevistas a grupos de medios de subsistencia: Se obtiene información sobre “las capacidades,
activos y estrategias a los que recurren las personas para vivir”<ref>Definición de “medios de subsistencia” según la página Web Issues we work on: Livelihoods. Oxfam, Reino Unido. Véase: [2]</ref>).
- Entrevistas familiares: Información de primera mano en cuanto a las condiciones de vida.
- Entrevistas sectoriales: Se obtiene información técnica, normalmente proporcionada
por informantes clave que trabajan en los sectores pertinentes (p. ej. personal de clínicas).